Las carreras
impulsadas han sido tomadas como referentes de la capacidad de un jugador de
ayudar a su equipo a producir carreras, pero ello constituye una verdad a
medias. Para que un bateador impulse carreras debe existir hombres en las bases
de lo contrario resultaría una empresa imposible y que existan hombres en las bases no es
producto del bateador de turno por lo tanto impulsar una carrera requiere de
colaboración, no es de ninguna forma un mérito aislado. Como la tradición ha
pretendido presentarnos las carreras impulsadas.
Las carreras
impulsadas están vinculadas a otras de la creencias del beisbol; el bateador en
el embrague, pero esto no es más que el niño Dios de los beisbolistas, la
evidencia objetiva; las matemáticas y las estadísticas nos demuestran que ello
no es posible, no existen los bateadores oportunos simplemente existen los buenos bateadores.
Tom Tango (seudónimo), brillante saber métrico norteamericano
quien ha realizado múltiples estudios sobre el caso, argumenta que la
muestra estadística para este caso requiere de 7600 turnos para establecer una diferencia entre el talento cotidiano y
el talento en situaciones de alto aplacamiento, además señala Tom Tango que la
muestra es demasiada exagerada para que
un individuo pueda cumplir con esa cantidad de turnos, también apunta que
haciendo una simulación con las cadenas de Markov la diferencia es tan mínima
entre el bateo en situaciones normales y de alto aplacamiento que no supera el
margen de error. Por lo tanto el bateador en el embrague es solo el buen talento añadido al azar.
Esta concepción se
ha entrelazado con las carreras impulsadas hasta convertirlas en un elemento
clave del talento de un jugador, sobre las cuales en el beisbol profesional se negocian
los contratos, aunque en esta era de la analítica han perdido vigencia en las negociaciones, no así en los medios de
comunicación donde se sigue exaltando común mérito personal cuando en realidad son un merito compartido.
En el pasado los impulsadores de carreras obtenían jugosos contratos en el Béisbol Profesional. Foto: Archivo |
Nadie puede
impulsar carreras sin hombres en base y tanto las impulsadas como las anotadas
simplemente son carreras asistidas. Las carreras impulsadas también tienen que
ver con el puesto en la alineación de bateo del jugador. Un primer bate tendrá
en la MLB 162 turnos sin hombres en las
almohadillas lo que lo pone en
desventaja con un cuarto o quinto hombre en la alineación.
Las carreras
impulsadas y el bateador en el embrague son creencias del beisbol que no pueden
utilizarse como parámetro para medir el verdadero talento de un jugador, hay
mucho mas estadísticas y mejores que nos
pueden ayudar a valorar mejor el aporte de un pelotero al juego, lejos de la
línea matemática tradicional del beisbol; AVG, RBI y HR.
* El señor Francisco Javier Gutiérrez Ocon, es colaborador de Béisbol Costarricense en la sección "Entradas Extras", la cual se encarga de hablarnos sobre curiosidades de este deporte. El señor Gutiérrez Ocon, fue presidente de las Pequeñas Ligas en Rivas y también fue directivo del equipo Frente Sur de la misma ciudad, así mismo escribe para la revista "Pisa y Corre" de Nicaragua.
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